Amuletos de buena suerte: el Elefante

Supersticiones y más supersticiones....Si dependiésemos de las supersticiones, tendríamos la casa como un bazar.
En verdad, hablan de que las supersticiones como esos amuletos o acciones que nos aportarían buena o mala suerte, y del mismo modo, al estar relacionados con el destino del ser, y con "premios" o "castigos" por sus propias acciones o deseos, es necesario tocar un poco el tema de la religión, ya que en las religiones, se suele plantear la superstición como una forma de deshonrar a "Dios".
Llegamos a un punto, en donde distintas religiones se plantean "no adorar a falsos dioses", y después, existe una amplia carta de dogmas en donde, por una parte hay que adorar a dios; por otra a dios y santos, santas y vírgenes; por otra sólo a una parte; por otra sólo a dioses y profetas; por otra a animales antropomórficos; por otra a dioses y semidioses; por otra a divinidades de la naturaleza; aún quedan de adoración a fenómenos meteorológicos y animales....
Lo cierto es, que en cada una de estas creencias hay seres con el deseo de mejorar, y con el temor a equivocarse. Y esta es la naturaleza que, creo que debería de reconciliarnos como seres que respiran un mismo aire, y sienten de igual modo.

Dejando atrás, las reflexiones existenciales y volviendo al tema de la buena suerte, tenemos ante nosotros al ELEFANTE CON LA TROMPA HACIA ARRIBA, que es el que "de verdad" da buena suerte.

Quedo sorprendida al saber en este cotilleo supersticioso que no basta con colocar uno en la casa con la trompa mirando hacia la puerta, sino que para que traiga buena suerte y riqueza se le ha de poner un billete, el de menor valor y doblarlo, al doblarlo se dice algo como "que este dinero se multiplique por cien". Esta acción se realiza el día 29 de cada mes, y al mes siguiente se cambia el billete, y el que estaba doblado se gasta en lo que nos planteamos al realizar este "ritual".

Bien, a mí me interesa más adentrarnos en la religión hindú, y en el dios Ganesha que es aquel del que procedería esta superstición en relación al elefante que se muestra con su trompa hacia arriba.

Ganesha, procede del sánscrito y su significado se traduciría como el señor de las multitudes. Esta imagen, puede encontrarse en toda la India

Creo que la imagen habla por sí sola. ¡Vamos¡, yo creo que entre el elefante con la trompa hacia arriba y ésta imagen de un dios con cuatro manos, oro, corona....optaría por el dios Ganesha, me da esa sensación de que me traería mejor suerte y más cosas. De hecho, voy a comprarme uno, que me gusta ese tipo de decoración.

Dejando atrás el tono de humor, y repitiendo que es realmente cierto que me gusta la imagen, nos vamos a adentrar en conocer la historia de la que parte esta adoración.

Ganesha es una de las deidades más conocidas y adoradas del panteón hinduista. Tiene, como se puede observar, cuerpo humano y cabeza de elefante. Es ampliamente reverenciado como ahuyentador de obstáculos, patrono de las artes y las ciencias, y el dios de la inteligencia y la sabiduría.
Pero, de dónde procede este cuerpo antropomórfico.
                                                         ¿Cómo surge este dios?

Según una versión, Parvati, que era la esposa de Shiva, lo concibió como el guardia de su puerta para evitar que nadie entrara mientras ella tomaba un baño. Cuando llegó Shiva, Ganesha ―que no lo conocía― no lo dejó entrar a su casa, por lo cual Shiva le cortó la cabeza.
Parvati quedó sumamente afligida. Entonces Shiva, no pudiendo soportar la tristeza de su esposa, y prometió sustituir la cabeza del recién nacido por la del primer ser vivo que oportunamente pasara por delante de la puerta. Y pasó un elefante.

Otra versión, más extendida,  narra que el dios Shiva abandonó su hogar cuando Parvati estaba embarazada. El dios, regresó a su hogar  después de un tiempo y se enfrentó a su propio hijo, dándole muerte, sin saber quién era.  Parvati a consecuencia de ese acto, queda desesperanzada, y rota. Su esposo Shiva, había asesinado al hijo de ambos. Entonces Shiva prometió sustituir la cabeza del recién nacido con la del primer bebé que no estuviera en el regazo de su madre. El único ser vivo que cumplió los requisitos fue el elefante.

                                         Cuáles son los atributos de este dios.
La mayoría de las representaciones del dios tienen cuatro brazos, en cada mano lleva un atributo distinto que puede variar, pero generalmente se trata de:

• un laddu ( un dulce ), que es su dulce favorito y que usa para obsequiar a sus fieles por sus actividades espirituales.
• una soga, para conducir a sus devotos hacia metas más altas y al sendero espiritual.
• un hacha, para cortar las ataduras perecederas de los devotos.
• una maza de oro  (que representa la justicia, el autocontrol).
• una trompa de caraco, con la que emite un sonido para llenar de alegría a sus fieles.
• un pedazo de colmillo roto como pluma para escribir el Majabjárata, que le es dictado por el sabio Viasa. 
• una mano extendida, para dar bendición a sus devotos.

Y junto a su imagen, aparece una rata. La rata es su "vajana", su vehículo. Representa a los deseos mundanos que le harían perderse, pero Ganesha puede gobernar esos deseos a su antojo. Su cabeza siempre muestra un halo, y esta representación muestra su origen divino.

Supersticiones y más supersticiones....pero el elefante con la trompa hacia arriba, procede de la religión hindú que llega a casi todos los hogares a través de los bazares, en forma de figura que se coloca mirando hacia la puerta.
¿Por qué ha de ser malo que el ser busque la prosperidad, la buena suerte, el bienestar?
¿Por qué la superstición se tacha de falsa?


ELEFANTES y CEMENTERIOS DE ANIMALES
Una característica que hace que este animal sea tan enigmático, es que cuando un miembro del clan fallece, hay una especie de duelo o entierro, de ceremonia junto al miembro que abandona el grupo. De hecho, se pueden observar llorando. Todos rodean al fallecido, y no hay un cementerio de animales, propiamente dicho, pero sí, un "cementerio espiritual" donde ellos en su reunión, se despiden para continuar en manada.